La NASA recientemente efectuó el segundo y último ensayo en tierra de un tipo de cohete que se usará en el futuro Sistema de Lanzamiento Espacial y, posteriormente, se prevé su uso para enviar misiones tripuladas a Marte.
Este artefacto de 54 metros, colocado horizontalmente sobre el terreno, funcionó durante dos minutos quemando 5,5 toneladas de combustible por segundo; mientras más de 500 equipos registraban múltiples datos para ser analizados en los próximos meses.
La prueba, realizada en un campo de ensayos de Orbital ATK Propulsion Systems en el estado de Utah, simulando un lanzamiento en invierno con temperaturas bajo de cero.
El primer ensayo fue realizado en marzo de 2015 con temperaturas cálidas para simular un lanzamiento realizado desde Florida.
La idea de las pruebas es para que el futuro sistema de lanzamiento de la NASA esté equipado con dos de estos cohetes, que son una versión más moderna y potente de los usados en el pasado los transportadores espaciales; consigna BioBio.
Ante esto, la NASA no duda en declarar que el artefacto se trata del cohete más poderoso del que se tiene registro hasta ahora.