Luego de pedir apoyo al Comité Olímpico Internacional tras ser retirada intempestivamente por parte del Comité de su país para los Juegos de Tokio 2020, la velocista Krystsina Tsimanouskaya llegó a la capital de Polonia, donde le ofrecieron una visa humanitaria para ella y su esposo.
A través de un mensaje el viceministro de Exteriores polaco, Marcin Przydacz afirmó que la corredora llegó “a salvo” y agradeció “a todo el personal consular y diplomático polaco involucrado”.
El Comité Olímpico Nacional de Belarús no se pronunció sobre el asunto este miércoles. En los días previos, la entidad afirmó que los entrenadores de Tsimanouskaya habían decidido retirarla de la competencia siguiendo las recomendaciones del cuerpo médico que alertó sobre su “estado emocional y psicológico”.