El Parque Rivadavia es un paseo imperdible de Buenos Aires, unas cuantas callejuelas donde se agolpan puestos donde se consiguen libros incunables, cds, vinilos, revistas de todas las épocas e incluso videojuegos.
Un porteño salió junto con amigos españoles a pasear por el mismo y encontró un libro que le llamó la atención ya que le habían recomendado sus contenidos. Pagó 3 dólares y se lo llevó a su casa.
El libro trata sobre diversas estafas perpetradas por grupos privados con bienes del estado argentino, un compendio de casos en espacios tan variados en autopistas, medicamentos, parques nacionales, Aerolíneas, con un foco en la época menemista. El caso estelar es el de Papel Prensa, la empresa de producción de papel estatal-privada que fue adquirida por Clarín y La Nación.
Una vez que llegó a su casa abrió el ejemplar y mientras lo ojeaba se encontró con un crujiente dolar que marcaba sus páginas.
Lo retiró del libro y lo inspeccionó, descubriendo que no era un dólar normal, ya que a diferencia de las nuevas tiradas, este no contaba con un sello verde, sino con un sello azul en la parte derecha; y que en la parte izquierda en vez de tener una letra contaba con el número uno de su valor.
Así es un dólar actual.
Pero, además, le llamó poderosamente la atención el año de su emisión: 1935.
Luego de googlearlo un rato descubrió que el billete, tal como sospechaba, era una rareza que se vendía en MercadoLibre a 220 dólares.
Si bien el afortunado ha decidido no venderlo por ahora, sino guardarlo por un tiempo, la historia es un buen ejemplo de los felices hallazgos en los productos de segunda mano.