Gustavo Ortega, representante del INDEC, nos explica que la contaminación acústica, definida como la presencia de ruidos no deseados en el ambiente, puede tener serias repercusiones en la salud, el bienestar y la calidad ambiental.
Según Ortega, esta problemática afecta tanto a nivel individual como colectivo, y es crucial actuar para mitigar sus efectos. Para enfrentar esta situación, se recomienda tomar medidas específicas que reduzcan la exposición al ruido y protejan la salud de las personas.