Uno de los placeres impagables en la vida es viajar. Perderse en algún país exótico, conocer alguna maravilla mundial o sencillamente estar acompañado de tu pareja en el fin del mundo no es algo que se haga todos los días; no todos se atreven. Menos cuando hay un recién nacido en la casa.
Sin embargo para Karen Edwards fue lo más sencillo del mundo. Después de tener a su pequeña hija llamada Esmé, ella y Shaun Bayes, su marido, decidieron recorrer el mundo. Muchos de sus amigos les dijeron que estaban locos, pero Karen les probó lo contrario con su blog de viaje en el que escribe todo lo que hacen y lo fácil que puede ser.
Para financiarlo arrendaron su casa, vendieron su auto y de vez en cuando trabajan de manera freelance, además de recibir dinero por la maternidad de Karen. Gracias a esto, hasta la fecha han ido a Irlanda, Bali, Singapur, Honk Kong, Australia, Taiwan, Indonesia, Vietnam y Malasia: ¡todos esos países con una pequeña!
"Creo que la idea es inspirar a los viajeros que tienen hijos. Sus días de viaje no están acabados." manifestó Karen en su página.