Jeremy Meeks saltó a la fama mundial, luego de que se ganara el título del "preso más sexy del mundo", gracias a su foto en el registro policial en la que quedaba en evidencia su atractivo: piel morena, labios gruesos y ojos color celeste.
Una vez que Jeremy terminó su condena de 27 meses en la cárcel, decidió cambiar su vida y prepararse para una carrera como modelo.
La primera marca en contactarlo fue Versace, pero hace tres meses el hombre compartió una foto en Instagram con la que anunciaba que se había unido a la agencia White Cross Management.
A varias semanas del hecho, por fin se dieron a conocer las primeras imágenes del "preso más sexy del mundo" como modelo, gracias a su perfil en la mencionada red social.
Pese a que no luce su cuerpo entero en una de las imágenes, a muchas les bastó con ver sus perfectas facciones luciendo un gorro del equipo de la NBA Golden State Warriors.
En otra de las captura, en tanto, luce con su torso desnudo como un sensual dueño de casa.