Este no es el primer caso donde alguien intente estafar a una compañía de seguros. Pero lo más probable es que sí sea el primero que se amputa una mano para conseguirlo.
El insólito hecho ocurrió en Castellón, provincia de España donde un hombre agobiado por las deudas no encontró nada mejor que contratar una serie de seguros para luego fingir un accidente donde supuestamente había perdido su mano derecha y así recibir las indemnizaciones correspondientes.
El tipo recibió ayuda de terceros para cortarse su extremidad para luego terminar el proceso con un torniquete. Posteriormente prendió fuego a su auto y fingió haberla perdido en un accidente.
Sin mano, tumbado en el suelo y fumándose un cigarro. Así esperó a la policía tras su trágico "accidente". Aunque posteriormente las aseguradoras lo indemnizaron 335.000 euros, finalmente las investigaciones descubrieron el fraude.
El hombre fue condenado a cuatro años de prisión por el delito continuado de estafa y obligado a pagar una multa de 3.000 euros y a devolver las indemnizaciones que había recibido por parte de las compañías aseguradoras.