Un estudio de la Universidad de Viena reveló cuál era la dieta de estos famosos guerreros de la antigua Roma, según informa la BBC.
Los gladiadores romanos eran generalmente prisioneros de guerra y criminales convictos. Peleaban a muerte contra animales y sus compañeros para entretener al público de la época. Aunque para la mayoría de los hombres era una condena, hubo unos pocos que eligieron esta arriesgada profesión.
Contrario a lo que se podría imaginar, la dieta de los gladiadores no se basaba en el consumo de carne sino que en base a granos. Así lo concluyó un estudio llevado a cabo por académicos de la Universidad de Viena, en Austria y de la Universidad de Berna en Suiza, a través del análisis de los huesos de varios gladiadores hallados en las ruinas de Éfeso, Turquía.
Los investigadores descubrieron que los niveles de estroncio y calcio eran más elevados que los hallados en los restos de otros habitantes del lugar. Ese dato parece confirmar que, efectivamente, esas personas habrían consumido habitualmente un tónico preparado con cenizas vegetales.
Pero, ¿qué propósito tenía tomar esa bebida? Parece ser que era debido a la creencia de que tenía poderes vigorizantes, y que ayudaba a que las heridas sanasen más rápido. Consumían cenizas de las plantas para fortificar el cuerpo tras el ejercicio físico y para mejorar la reparación de los huesos dañados, explica Fabian Kanz, del departamento de medicina forense de la Universidad de Viena a BBC.
Sin embargo, hay dos gladiadores cuyos huesos muestran una diferencia frente al resto. Al parecer sus huesos indicarían que efectivamente consumían proteína animal y muy poco grano. Esto podría significar que las dietas cambiaban de acuerdo a las distintas regiones del Imperio Romano.
Por esta razón, la siguiente etapa de la investigación consistirá en averiguar la procedencia exacta de cada uno de los gladiadores analizados.
Fotos: Shutterstock
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