La imagen muestra al pequeño en brazos del voluntario que lo sacó del agua. Fue hallado en el mar de Libia junto a otros 45 cuerpos después de que se hundiera el barco con el que querían llegar a Europa.
Al igual que la fotografía del niño sirio de tres años Aylan Kurdi, hallado muerto en una playa de Turquía el año pasado, la imagen que trascendió este lunes de un bebé sin vida pone un rostro humano a los miles de personas que zozobraron en el Mediterráneo.
El niño se ve en la foto acunado por un rescatista. "Tomé el brazo del bebé (para sacarlo del agua) y de inmediato protegí el pequeño cuerpo en mis brazos como si aún estuviera vivo. El sol brillaba en sus ojos inmóviles", relató el hombre.
La imagen fue divulgada por la organización alemana de ayuda humanitaria Sea Watch, que colabora en el rescate de refugiados en el mar entre Libia e Italia. El objetivo: llamar a los gobiernos a abrir un paso seguro para los migrantes que intentan alcanzar las costas europeas.
Poco se sabe sobre el bebé que aparece en la imagen.
No parece tener más de un año de edad. Fue hallado en el mar el viernes pasado frente a las costas de Libia, tras el colapso de un barco de madera. El buque de la Armada italiana Vega pudo rescatar a 135 personas de la embarcación hundida y sacó del agua 45 cuerpos.
De acuerdo con Sea Watch, el cuerpo del bebé fue entregado a la Marina italiana. Los equipos de rescate no pudieron confirmar si el bebé era un niño o una niña. No se sabe tampoco si la madre o el padre del niño se encontraban entre los sobrevivientes.
El rescatista alemán que se ve en la foto es padre de tres hijos y terapeuta musical. Relató a la prensa que, ya con el niño en brazos, empezó a cantar en busca de consuelo y como una forma de expresión en ese "momento incomprensible y desgarrador". "Seis horas antes, este niño estaba vivo", dijo.
La semana pasada, unos 700 migrantes, entre ellos 40 niños, murieron en varios naufragios, según un informe elaborado por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), con base en los testimonios de sobrevivientes
En 2014 y 2015, más de 320.000 barcos con migrantes llegaron a las costas italianas y unas 7.000 personas perecieron en el mar Mediterráneo en su intento por cruzar a Europa, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).