Con la voz entrecortada y angustiada Margini Fernández Flores, madre del niño, de ocho años de edad, que fue atacado por un cocodrilo en el río Matina de Costa Rica, solicitó a las autoridades de ese país capturar y sacrificar al animal.
El pasado 30 de octubre la víctima y su familia llegaron al río a recrearse sin imaginar el peligro que les esperaba en el lugar. Cabe señalar que esta zona carece de señalización que advierta a las personas de la presencia de los cocodrilos.
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Este viernes un funcionario del Sistema Nacional de Áreas de Conservación de Costa Rica, conocido como Sinac, informó que atraparán al reptil, pero no especificó la fecha de la captura. Además, detalló que el animal no puede ser sacrificado, ya que matarlo constituye un delito.
Extraoficialmente medios de comunicación de ese país informaron que funcionarios del Sinac tratarían de hacer vomitar al animal con la esperanza de encontrar restos del niño en su interior. La familia del menor ha señalado que el cocodrilo tiene su madriguera a 150 metros del lugar donde se registró el ataque.
Por Carlos Larios.