El presidente de la petrolera rusa Lukoil, Ravil Maganov, falleció este jueves tras caer por una ventana del Hospital Clínico Central de Moscú donde estaba ingresado, según informaron las agencias rusas Interfax y TASS.
Su empresa, sin embargo, dijo en un comunicado que falleció “tras una larga enfermedad” sin precisar nada más sobre las circunstancias concretas de su muerte.
El petrolero, de 67 años, estuvo ingresado en el hospital por un ataque cardíaco y tomaba antidepresivos. Y su muerte, que ahora investiga la policía, se suma a la lista de fallecimientos de altos ejecutivos rusos en circunstancias sospechosas y llega tras la de Daría Dugina, la hija del considerado “cerebro de Putin”.