La atleta alemana Malaika Mihambo ganó la final en la modalidad de salto de longitud femenino con 7.0 metros, por lo que se convierte en la mejor de la temporada. De esta forma, la campeona del mundo se ha convertido en campeona Olímpica.
Le han seguido en el podio la estadounidense Brittney Reese, que consigue la medalla de plata con la misma puntuación que su compañera nigeriana y ganadora del bronce, Ese Brume: con 6.97 metros.