Hace unos meses, en el día internacional del Síndrome de Down, se inauguró en Villa Carlos Paz, una ciudad turística situada en el oeste de Córdoba en el centro de Argentina, el primer hotel del país y de toda América Latina en ser administrado y atendido por chicos con esta “discapacidad”.
El proyecto madre, que luego llegó a Córdoba, nació en la ciudad de Asti, en el piamonte italiano. Allí, entre las colinas, un pequeño hotel, con casi nueve punto en la valoración de los especialistas, da un servicio único a nivel mundial, que además de confortar, conmueve: el 50% de su personal son jóvenes con síndrome de Down.
El equipo de servicio está constituido por 12 jóvenes, cinco de los cuales cuentan con experiencia previa en otro hotel, pero todos ellos con la ilusión y las ganas de trabajar a flor de piel, pues son muy conscientes de la dignidad que trae consigo el esfuerzo y el trabajo duro para mejorar la calidad de vida de cualquier persona.
El emprendimiento pretende convertirse, no sólo en un negocio exitoso sino también, con el tiempo, en una escuela con instalaciones para albergar a jóvenes con Síndrome de Down de otras regiones del país que quieran formarse en Hotelería y Turismo para que ellos mismos abran con el tiempo sucursales en cualquier parte del mundo.
Mismos que hoy en día su trabajo en el Hotel laboran en áreas como en recepción, el comedor, la cocina, las habitaciones y en mantenimiento.
Personas felicitaron de corazón a estos jóvenes emprendedores y saben con toda certeza que su hotel contará con el más alto reconocimiento al buen servicio, pues está, no sólo en buenas manos, sino, en manos y mentes capaces.