Carlos López Corea, de 37 años, falleció la mañana del pasado 30 de mayo, luego que impactó la motocicleta que conducía contra las vías ferroviarias, a unos 150 metros del Mall Oxígeno en Heredia, Costa Rica.
De acuerdo con miembros del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) López se dirigía hacia su centro de trabajo a eso de las 5:30 a.m., y se deduce que la luz del sol le impidió ver el artefacto, provocando la tragedia.
Autoridades confirmaron que el nicaragüense estaba utilizando unos audífonos, lo que le impidió enterarse de que la locomotora estaba cerca.
Según la versión de un testigo aclaró que “en apariencia el muchacho conducía a exceso de velocidad por el lado derecho rebasando a los carros que estaban esperando para virar a la izquierda y como la aguja estaba abajo pegó la cabeza”.
Se indica que, por el impacto de la aguja, esta se partió en dos. Asimismo, la moto quedó a unos 10 metros de distancia del cuerpo de López. A pesar de que la víctima portaba su casco, murió de manera instantánea debido al golpe recibido.