El Gobierno de Venezuela decidió reabrir el paso del Puente Internacional Simón Bolívar, fronterizo con Colombia, el más importante entre ambos países, luego que, este estuviese dos años cerrado desde la ruptura de relaciones diplomáticas que provocó la crisis de Cúcuta en febrero de 2019.
Entonces, la oposición venezolana no pudo ingresar la ayuda humanitaria enviada desde el extranjero, una medida de presión orquestada en medio de una estrategia de asedio al Gobierno de Nicolás Maduro desde las zonas fronterizas colombianas muy poco después de la irrupción de Juan Guaidó como nuevo presidente de la Asamblea Nacional clamando por el fraude en la reelección de Maduro y pidiendo nuevas elecciones presidenciales.