Hasta el 28 de febrero del 2050 pasará en la cárcel Azucena Amador Urbina, tras ser condenada a 26 años de prisión, por la jueza especializada en violencia de El Rama, María Adela Vargas Duarte, por haber matado a su hijastro, de 5 años, la mañana del pasado 27 de febrero en su vivienda ubicada en la comunidad La Concha, jurisdicción del municipio de Muelle de los Bueyes, en el Caribe Sur.
La mujer, de 26 años de edad, admitió en la audiencia inicial que le quitó la vida al infante con sus propias manos sujetándolo del cuello hasta asfixiarlo, por no haber pastoreado unas vacas de un potrero a como se lo había ordenado, lo que la enfureció y con odio le propinó un golpe con una tajona en el rostro.
Producto del golpe el niño cayó al suelo e inmediatamente empezó a llorar, mientras que su madrastra se dirigió molesta al corral a sacar una vaca. Al regresar, se enfureció aún más al observar que el niño seguía llorando y con odio le presionó el cuello hasta causarle la muerte. El menor convivía con su padre, quien había salido desde temprano a trabajar, por lo que el aberrante hecho sucedió cuando ambos se encontraban solos.
Amador Urbina también dijo que cuatro días antes le había propinado dos cinchazos en la espalda, por no arrear unos pollos y a un gato que ingresaron a la cocina, mientras él se encontraba jugando. Luego de admitir los hechos, la judicial la declaró culpable y deberá pagar la condena en el Sistema Penitenciario de Cuisalá, ubicado en el departamento de Chontales.
Por Kevin Arrieta.