Un joven de 29 años de edad, de nacionalidad nicaragüense, falleció en San José, Costa Rica, tras sufrir una caída de 300 metros de altura mientras laboraba en un cafetal. El jefe de la víctima se habría percatado de lo sucedido, ya que salió a buscarlo porque no regresaba. Según la información, el hombre habría sufrido un golpe fuerte en la cabeza.