Ante las cámaras —una vez finalizado el encuentro (2-1 a favor de Argentina)— el jugador explicó que es complicado estar lejos de su familia en un momento tan importamte como lo es el fallecimiento de un ser querido.
Di María contó que su madre le pidió que jugara con su selección, que ganara el partido y le dedicara un gol a su abuela. Su voz se quebró. El argentino no aguantó las lágrimas.