Una niña de 11 años que se untó con la sangre de su amiga asesinada para hacerse la muerta durante el tiroteo en una escuela de Texas hace dos semanas, testifica este miércoles en el Congreso de Estados Unidos.
Miah Cerrillo, Miah tiene pesadillas y todavía se está recuperando de fragmentos de bala en la espalda y lididando con el trauma, dijo su padre, Miguel Cerrillo.
El testimonio de Miah tiene lugar cuando el Congreso enfrenta una presión cada vez mayor para responder a la creciente violencia armada en todo el país, especialmente en forma de tiroteos masivos (incidentes con al menos cuatro muertos o heridos, sin incluir al atacante).