El honor, se espera, sea un acto simbólico tan potente como el de la edición Tokio 1964, cuando lo hizo atleta que nació el mismo día que Japón recibió el primer ataque en la historia con una bomba atómica.
El 10 de octubre de 1964, a sus 19 años, Yoshinori Sakai llevó la antorcha olímpica hasta el pebetero y encendió el fuego de los decimoctavos Juegos Olímpicos, celebrados en Tokio, Japón.
La identidad de la figura que encenderá el pebetero el próximo viernes parece ser el secreto mejor guardado del planeta. Al momento, se desconoce quién lo hará, aunque algunos han sugerido que un candidato podría ser el golfista Hideki Matsuyama, quien en abril se convirtió en el primer japonés en ganar un evento mayor del PGA Tour al ganar The Masters.