La candidata presidencial peruana, Keiko Fujimori podrá seguir en libertad mientras es investigada por presunta corrupción, vinculada al caso Odebrecht, así lo determinó un juez ayer lunes, tras rechazar el pedido de un fiscal que solicita hasta 30 años de prisión contra la líder política.
La decisión se conoce en momentos en que Fujimori lucha por anular votos de las elecciones del pasado 6 de junio, frente al virtual ganador Pedro Castillo.
Dentro de las condiciones impuestas en 2020 a la candidata presidencial para que recuperara su libertad condicional está la prohibición de comunicarse con testigos vinculados al caso y eso es justamente lo que el fiscal asegura que Fujimori infringió.