El pulpo Paul, que saltó a la fama durante el Mundial de Fútbol de Sudáfrica por sus acertadas predicciones de los ganadores de los encuentros, falleció en Alemania en el 2014 en su pecera del acuario Sea Life de Oberhausen.
El famoso cefalópodo acertó a lo largo del torneo no solo el desenlace de los encuentros que disputó la selección alemana de fútbol, sino también la final entre España y Holanda que ganó el conjunto español.
Desde Oberbausen explicaron que Paul falleció por causas naturales debido a su avanzada edad, cuando había cumplido los tres años de edad media de vida de un pulpo, y como un asceta, ya que no llegó a tener vida sexual.