En la comarca Miraflores, ubicada en el kilómetro 15 de la carretera hacia el balneario a Xiloá, la lluvia que cayó la noche del viernes pasado dejó a cuatro familias afectadas, el agua arrastró basura que taqueó un puente del lugar, provocando una noche triste y de desvelo para ellos.
Ropa, colchones, entre otros enseres se les llenó de lodo, el nivel del agua les llegaba hasta las rodillas indicaron los habitantes. El invierno, según lo anunció días atrás el Instituto Nicaragüenses de Estudios Territoriales (Ineter) inicia a mediados de mayo, lo que preocupa a los afectados que tienen hijos pequeños.
En este sector habitan más de 20 personas, entre ellos menores de edad, quienes por el momento no asistirán a clases indicaron sus padres, puesto que también la fuerte lluvia que cayó dañó la tubería de agua potable, dejándolos sin el servicio tan necesario para bañarse y preparar los alimentos.
Por Kathy Molina.