Un menor de apellidos Rivera Sánchez, de 7 años de edad, murió asfixiado tras atragantarse cuando comía mamones la mañana de este pasado domingo 5 de noviembre, en el barrio Tomás Borge, en Sébaco, Matagalpa. Según información extraoficial, los padres se percataron de que el menor hizo movimientos bruscos, por lo que hasta ese momento se dieron cuenta que tenía una semilla de mamón atorada en la garganta.
Inmediatamente realizaron maniobras para que el menor pudiera expulsar el fruto, pero lamentablemente no lo lograron. Tras esto fue llevado al Centro de Salud de Sébaco, donde ingresó ya fallecido.
Según datos oficiales, el menor es el segundo en morir asfixiado en lo que va de este 2023. La primera fue una niña de iniciales N. E., quien pereció luego de haber tomado una pastilla grande, en el reparto William Fonseca de la ciudad de León.