Tras un placentero viaje por Nigeria, un hombre de 42 años descubrió algo muy extraño en su pie. Parecía que sólo era mala circulación en sus piernas, lo que le había causado un enorme várice, pero la verdadera razón escondía algo realmente asqueroso.
Luego de que el sujeto visitara el doctor, quien le dijo que efectivamente era una vena varicosa y que probablemente había estado así por mucho tiempo, por lo que no le tomó mayor importancia al asunto.
Sin embargo, cuando el viajero comenzó a notar que su extraña vena se movía decidió acudir a otro especialista, quien lo sacaría de sus dudas al aclararle que lo que tenía era en horrible huésped.
El hombre tenía un parásito, conocido como Larva Migrans cutáneo, los cuales suelen vivir en los intestinos de las mascotas y son expulsados a través de sus heces.