Si recibes una frase por WhatsApp que termina con un punto, tienes dos posibilidades: Uno, o es tu mamá y no sabe escribir de otra forma a la que le enseñaron cuando tenía 6 años. Dos, la persona que te envía el mensaje está enojada.
En la nueva era de la comunicación, donde todo es inmediato, las normas de puntuación se relajan y los usuarios crean su propio código, al margen de la RAE. Todo por facilitar la comunicación.
En todo esto el punto tiene un papel muy limitado. Si alguien acaba una frase con un punto en un chat percibimos la distancia, una especie de corte tajante de la conversación.
Un estudio realizado por la State University de New York Binghamton llegó a la conclusión de que acabar con un punto un mensaje de texto o un mensaje en chats como el WhatsApp, u otro tipo de aplicaciones móviles de mensajería instantánea, refleja insinceridad, enfado y brusquedad.
En el estudio que participaron 126 estudiantes universitarios. Ante la pregunta “Dave me ha regalado entradas, ¿quieres venir?” se pidió a los participantes que contestaran con expresiones del tipo “ok”, “sí”, “claro”. Estas palabras estarían finalizadas, o no, por un punto al final. Al evaluar las reacciones de quienes recibían la respuesta se dieron cuenta de la diferencia que marcaba el punto.
Otros signos de puntuación expresan lo contrario al punto, por ejemplo terminar la frase con un signo de exclamación le da un toque de sinceridad al mensaje.
Ya sabes que para la próxima vez que envíes un mensaje por WhatsApp, piensa bien donde pones el punto en tu frase.