Heather Krueger fue diagnosticada con una avanzada enfermedad al hígado en marzo de 2014. Con un pronóstico de vida inferior a dos meses, su única opción era encontrar a una persona que el donara más la mitad de su hígado. Toda su familia fue testada, pero ninguno resulto ser compatible.
Fue en esta circunstancias cuando Chris Dempsey, un ex miembro del ejército, escuchó la historia de un primo de Heather con el cual trabajaba. No dudo ni un instante en ofrecerse a ayudar. Le hicieron todos los estudios de rigor para finalmente determinar que sí era compatible. Hizo todo esto sin siquiera conocerla.
Al conocer los resultados, Chris llamo a Heather y simplemente le dijo “los resultados salieron geniales. Hagámoslo. Soy compatible, soy tu donante.”
La cirugía, en la cual Dempsey donó un 55% de su hígado a Krueger, duro más de 8 horas y el proceso de recuperación, cerca de 2 meses. Dentro de ese tiempo llegaron a conocerse a profundidad y se enamoraron.
“Si no hubiera sido por esta persona, no habría llegado hasta navidad. Es una persona generosa y valiente que estaba perfectamente sano y no me conocía antes de esto”, cuenta Heather.
El camino de recuperación fue difícil y largo, sin embargo, cuando le preguntan a Chris si lo haría de nuevo el responde que sí, sin dudarlo.
Habiendo ya pasado varios meses desde la cirugía, Chris le pidió a Heather que se casara con él mientras andaban en un romántico carruaje por Chicago.
El sí no se hizo esperar y la pareja planea casarse en octubre, junto con todo el personal de salud que fue parte de su historia.
“Nunca sabes qué pasara para cambiar la vida de alguien. Si alguien me hubiera dicho esto hace 1 año, no lo hubiera creído.” declara Krueger sobre el inesperado giro que tomó su vida.